El tiempo se acaba rumbo a las
elecciones, y como decía doña Guísela Bruun Sciaroni: ‘Santa Cruz padece de
amnesia’. Esta gran dama impulsora de las luchas cívicas del siglo pasado se
refería a la acogida que se le estaba dando en el oriente al régimen del
autoritario Evo Morales Ayma.
Y es que para entonces, el líder
cocalero ya le había declarado la guerra a la Iglesia, a los medios de
comunicación, y a quienes disentían de su gobierno, mientras que en Santa Cruz formaba
más codiciosos adeptos.
En el 2008, Morales dijo que la
“Iglesia Católica en Bolivia es la principal enemiga de las reformas que su
gobierno quiere implementar, y que era necesario reemplazarla”. Cuando
asumió el poder, Morales prometió
que en su gestión "no habrá ningún muerto". Sin embargo, casos como
Huanuni, La Calancha, Caranavi, Porvenir, entre otros, suman más de 200.
Además de los crímenes cometidos
en su gestión, se suma la violación a los Derechos Humanos en el país, la
persecución, aprehensión y exilio de los opositores a su gobierno.
Entre el cúmulo de denuncias
contra el Movimiento Al Socialismo, presentadas en La Haya y la Cidh, se
encuentran desapariciones, muertes y sistemática violación de los Derechos
Humanos. Crímenes de lesa humanidad y con saña como el caso Porvenir y la
masacre en el Hotel Las Américas, ya se ventilan en los organismos
internacionales.
Siendo la administración de Evo
Morales un Gobierno salido de las marchas y con un discurso indígena, reprimió
a los indígenas del Tipnis intentando privarlos de su justo derecho a protestar
pacíficamente.
En 2009, Evo Morales planificó la
denominada "Masacre de Porvenir", en la que se ejecutó una acción
armada donde se utilizaron a campesinos para acallar a los defensores de la
autonomía departamental. Ese mismo año se realizó la matanza del Hotel Las
Américas. Allí fallecieron tres ciudadanos, y con un discurso de supuesto
separatismo encarceló a una treintena de autonomistas, y persiguió a todo aquel
que soñaba con una autonomía plena para el progreso de los pueblos.
Otro de los momentos álgidos en
los 9 años de la administración de Juan Evo Morales Ayma, fueron los luctuosos
sucesos que se registraron en Huanuni, Oruro, donde se registraron 16 muertos y
más de 60 heridos, luego que los ministros Alicia Muñoz y Juan Ramón Quintana
desoyeron los pedidos para evitar los enfrentamientos.
Ese mismo año, el 2006, Santiago
Orocondo, un policía, cayó abatido por una bala de uso militar. Meses después
dos cocaleros fallecen en un enfrentamiento con policías y militares
erradicadores en Cochabamba.
Posteriormente el policía Juan
Carlos Quenallata murió en un desbloqueo en Caihuasi.
En Cochabamba, dos jóvenes
estudiantes murieron durante las refriegas impulsadas por senadores y dirigentes
del MAS.
Tarija también se vistió de luto
cuando en el 2007 Herman Ruiz Torres murió a causa de un impacto de bala, tras
la intervención militar en Villamontes.
La represión policial y militar
del 2007 mató también al estudiante de la Normal Ismael Montes con un balazo
que le reventó la cara y que salió por la nuca.
Durante las protestas organizadas
por los universitarios de Sucre, contra la sesión ilegal de la Asamblea
Constituyente en el recinto militar de "La Glorieta", se produce la
matanza de La Calancha donde las víctimas tenían heridas de bala de 5.56
milímetros, de los fusiles Galil que utiliza la unidad antiterrorista de la
Policía Nacional, hoy llamada Fuerza Delta.
La sangre también corrió en
territorio cruceño. En La Guardia un joven unionista fue cruelmente asesinado
por los seguidores de Morales. Mientras que en Yapacaní, 3 muertos y medio
centenar de heridos fue el saldo de la intervención policial por una disputa
municipal entre masistas.
Pese a que Evo Morales fue el
‘rey de los bloqueos’ en Bolivia, lo que causó su expulsión del Parlamento, no
soporta que otras personas protesten de la misma manera, y en el 2012 hizo
intervenir una protesta en Caranavi dejando dos muertos y una veintena de
heridos. Los pobladores responsabilizaron de la represión a dos ministros,
entre ellos el de Gobierno, Sacha Llorenti, y a dos viceministros. Como premio
del asesinato, ahora Llorenti nos representa en la ONU.
La lista de muertos, heridos,
perseguidos, detenidos y extorsionados es larga en los años bajo el Gobierno de
Evo Morales. En los inicios de su gestión, el presidente de las seis
federaciones de cocaleros del Chapare marcó línea contra los departamentos que
conformaban la otrora media luna, pero especialmente contra Santa Cruz, donde
ni siquiera era invitado a su Feria Exposición.
Cabe recordar que cada
septiembre, los SS (sectores sociales) del MAS cercaban el departamento, y
armados amenazaban con tomar la Expocruz y entrarse hasta la plaza principal.
No conformes con ello, cada semana llegaban miles de colonos a avasallar las
tierras productivas de los empresarios.
Hoy, la realidad es otra. La
Feria Exposición no se abre si no llega Evo Morales a inaugurarla; los
empresarios privados encontraron su ‘Goldman Sachs’ con el MAS y ahora ganan
más plata que nunca. El pedido de autonomía quedó en el recuerdo del león
dormido que nunca despertó.
Está por descontado que pronto
tendremos un ‘re re re’ Morales, ya que a la oposición le pasó lo mismo que a
una vaca en remate, se fue con el mejor postor. Y aunque de seguro en el MAS
hay sumas que le restan (caso Jéssica Echeverría), el interés es mostrar que
ellos con su plata y sus pegas pueden comprar a quien sea.
Pero hay cosas que nunca se
venden... como el alma del cruceño, la libertad de las personas, y la memoria
de los pueblos que han sufrido la tiranía opresora de sus gobernantes.
¡Solamente no hay que padecer amnesia!
No olvidemos que somos
"Hombres Libres".
Por ello "Siempre libres
cruceños seamos"…
Perseguido Político.
NO SUFRAMOS DE AMNESIA
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